Hoy, día 3 de octubre de 2016, a efectos prácticos, entran en vigor las nuevas normas administrativas sucesoras de la mítica Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.

Hoy, día 3 de octubre de 2016, a efectos prácticos entran en vigor las nuevas normas administrativas sucesoras de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.

Demos la bienvenida a la Ley 39/2016, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas y a la Ley 40/2015, de 1 de octubre, de Régimen Jurídico del sector público.

Estas nuevas normas siamesas suponen una reforma de calado, enmarcada en un contexto de crisis económica y déficit público, en el que los objetivos venían exigidos por la necesidad de reactivar el tejido empresarial, objetivos de reducción de costes, simplificación de los trámites al ciudadano y creación de una Administración eficaz y eficiente.

Además, estas reformas tienden a una Administración Pública completamente electrónica, exigencia que viene de lejos y que debía reflejarse también en la actuación administrativa.

Se han producido importantes cambios, especialmente los que trae la Ley 39/2015: supresión de los procedimientos especiales, establecimiento de un procedimiento único para todas las AAPP, inhabilitación de los sábados, cómputo de plazos por horas, y un largo etcétera.

Toda la información sobre las NOVEDADES que incorporan estas nuevas normas han sido recopiladas en sendas NOTAS INFORMATIVAS del Ministerio de empleo y Seguridad Social, que adjuntamos a este post.