El Gobierno ha dado esta semana el paso definitivo para que el próximo 1 de enero de 2025 entre en vigor la llamada ‘cuota de solidaridad‘, un recargo que asumirán los trabajadores con salarios superiores a la base máxima de cotización (54.000 euros anuales) y cuya recaudación se destinará al pago de las pensiones públicas.
Aunque la aplicación a partir de esa fecha ya estaba prevista -forma parte de la reforma de las pensiones que aprobó el exministro José Luis Escrivá en 2021-, el Gobierno tenía pendiente aprobar su desarrollo reglamentario, algo que hizo este martes en el Consejo de Ministros vía modificación del Reglamento sobre Cotización y Liquidación.
Fuente: El Mundo